Seminario en construcción:

 

¿Psicoanálisis trans? O por un transpsicoanálisis que nos permite interrogar localmente la subversión del sujeto.

 

Imparte: Jessica Bekerman

 

Vivimos tiempos complejos. Bruno Latour sitúa este punto de inflexión a comienzos de los años noventa, cuando empieza subrepticiamente –dice- “otra historia”. Una historia que cambia radicalmente nuestros modos de existencia, así como los modos de producción de la vida sobre la Tierra. Ciertas palabras, que recibimos de manera acrítica como desregulación o globalización, la migración como el monstruo contemporáneo, la explosión de las desigualdades; pero también la desmentida del cambio climático y del ecocidio –desmentida es el nombre freudiano del mecanismo por el cual percibimos y negamos lo percibido-, la violencia brutal en la que vivimos, el ascenso de los neofascismos: especialmente la elección de Trump en Estados Unidos y ahora Bolsonaro en Brazil, el Brexit, la universalización de las neurociencias y de la ciencia con la investigación genética y la manipulación directa sobre el genoma humano, el matiz peligrosamente identitario e igualitario que ha tomado cierto feminismo y un largo etcétera.

 

Bruno Latour  señala la impresión de vértigo, casi de pánico, que atraviesa toda la política contemporánea como efecto del hecho de que el suelo –dice- está cediendo bajo nuestros pies, “como si cada uno se sintiera atacado desde todas partes en sus costumbres y en sus bienes”.

 

De este lado del Atlántico, esos movimientos del suelo cuyos nombres son el despojo, la privación del territorio, la imposición de una lengua tienen el tiempo de la conquista y de la colonización. The other side, el lado b del último giro colonial, el  neoliberalismo y la globalización, está siendo pensado por Sayak Valencia con una noción novedosa con la que interroga sus consecuencias situadas geopolíticamente, sus efectos locales en nuestras subjetividades y en nuestros deseos. Esa noción novedosa es capitalismo gore.

 

La propuesta de este seminario es: prestar atención. Prestar atención a la  subjetividad que crece en los huecos de nuestros mundos relegados: prácticas extremas de la violencia, el asesinato y la desaparición, los feminicidios y los femicidios, las identidades que pasan por el consumo (de bienes materiales, culturales, artísticos y simbólicos), los modos de existencia que funcionan por la adicción y la producción de placer, la producción de sicarios, la desmentida del cambio climático, la psicopatología de nuestro lenguaje cotidiano; pero también modos de existencia que no “realimentan el bucle de la forma blanca, heterosexual y masculina” (Sayak Valencia), para  hacer allí algunas buenas preguntas.

 

Responder antes de abrir el campo de una intervención nos deja del lado de un cierto psicoanálisis que es, justamente, el que queremos interpelar. Allí donde reina la lógica mercantil (nacionalismos que construyen su identidad a través del consumo, democracias de masas) el psicoanálisis puede tomar el carácter de mercancía y la transferencia un bien que se comercia en los mercados del saber. Es la intervención la que abre un campo –y no al revés. Son nuestros pacientes quienes nos hacen analistas, quienes nos inventan en nuestra escucha. Pensar nuestra intervención, lo que hacemos es lo que determina el campo que allí surge como efecto.

 

El psicoanálisis debe ponerse en situación. Porque el psicoanálisis no es una metateoría, insituable en el tiempo, des-contextuada de ciertas condiciones de producción. Al mismo tiempo, que el psicoanálisis surja en Europa no implica –incluso lo contrario- una teoría colonial –como se ha insistido en ciertas iniciativas Sur. Situarnos y hacer las preguntas que nos conciernen es un modo de no hacer del psicoanálisis una cosmovisión.  Freud inventó el psicoanálisis con lo que tenía cerca. Lacan resituó ese descubrimiento allí donde el psicoanálisis, a pesar de Freud, estaba siendo tomado por el paradigma que llevó al imperialismo colonial.

 

Hacernos las preguntas situadas desde una mirada no central, ni primermundista; es decir, desde una mirada que no nos homogenice, ni nos victimice, ni nos englobe en una realidad precaria y vulnerable, o también en una realidad blanca que desmiente eso que de este lado del Atlántico nos constituye –empezando por nuestras lenguas. Quizá, podemos arriesgar, para poner a jugar nuestras categorías: situarnos antes de un cierto estadio del espejo. Antes de esa mirada, que no sin un asentimiento muy de aquí, nos constituye como periferia, pobre, indígena, latinoamericana (respecto de la cual ocurre que analistas y analizantes nos situamos como excepción).

 

Psicoanálisis trans? Transpsicoanálisis (como quien dice transfeminismo)? Se me ocurre que esta noción apunta  al movimiento que nos pone en situación de interrogar siempre localmente la subversión del sujeto, allí donde ésta implica decir NO a la lógica colonial, neofascista, heteronormativa, humanista y patriarcal. Allí donde, el psicoanálisis no es más que el desarrollo de la pregunta por el sujeto que suponemos como consecuencia del descubrimiento de Freud: el inconsciente.

  

He escrito este argumento de manera un poco intuitiva, en función de los temas que estoy trabajando, para responder a una invitación recibida recientemente a impartir un seminario de posgrado en 17 Instituto de Estudios Críticos. En este sentido, este seminario asume la posición que Barthes refiere como aquella que conviene al intelectual que enseña e investiga: “Hay una edad en que se enseña lo que se sabe; pero inmediatamente viene otra en la que se enseña lo que no se sabe: eso se llama investigar”. Así, este argumento es el inicio de un recorrido que iremos haciendo juntos, del que aún no conozco todas las escalas. Por eso aquí se sugiere una bibliografía y filmografía mínima, de arranque, que podrá ampliarse o disminuirse en función del camino que vayamos haciendo.

 

Materiales

 

Bruno Latour, Donde aterrizar (selección)

Santiago Castro Gomez, La decolonialidad enseñada a los niños (primera prte)

Santiago Castro Gomez, La hybris del punto cero (selección)

Andrés Claro, El mito de Babel (la interrupción de la totalidad)

Rita Laura Segato, Las estructuras elementales de la violencia (selección).

Sigmund Freud, El malestar en la cultura

Sigmund Freud, Psicología de las masas y análisis del yo.

Sigmund Freud, El fetichismo.

Jacques Lacan, Seminario XVII, El envés del psicoanálisis

Jacques Lacan, La subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente

Jacques Lacan, La agresividad en psicoanálisis

Jacques Lacan, El estadio del espejo y la formación del yo

Lacan, J., Seminario La lógica del fantasma, clase del 10 de mayo de 1967

Jacques Lacan, Seminario XI, Los fundamentos del psicoanálisis (selección).

Etienne de la Boétie, El discurso de la servidumbre voluntaria.

Sayak Valencia,  Capitalismo gore (selección)

Sayak Valencia,  Erótica gore y transfeminismo

Sayak Valencia, Del fascinante fascismo a la fascinante violencia: Psico/bio/necro/política y mercado gore.

Paolo Pasolini, Empirismo herético (selección).

Homi Bhabha, El lugar de la cultura (Capítulo: “Interrogar la identidad”)

Filmografía inicial:

Made in Britain, dirigida por Alan Clark (1982)

The century of the self, dirigida por Adam Curtis (2002): cuatro episodios.

Donna Haraway, Storytelling for earthly survival, dirigida por Fabrizio Mejia (2016).

Nausicaa del valle del viento, dirigida por Hayao Miyazaki (1984).

La cuestión humana, dirigida por Nicolás Klotz (2007).

El sicario, Room 164, dirigida por Gianfranco Rosi (2010)